Crece demanda por expertos en gestión de recursos hídricos. Con un ingreso mensual promedio de $1.790.000 al cuarto año de titulado, se ubica en el puesto número 14 de las carreras mejor pagadas de Chile, en base al ranking que elabora el portal Dondeestudiar.cl
La escasez de profesionales expertos en gestión de recursos hídricos y en soluciones tecnológicas para la agricultura y la agroindustria en un contexto de sequía y de expansión de la actividad frutícola hacia el sur del país, es uno de los factores que ha favorecido el aumento del salario promedio de los ingenieros civiles agrícolas en los últimos años, según manifestó el Dr. Camilo Souto Escalona, jefe de carrera de Ingeniería Civil Agrícola, que imparte la Facultad de Ingeniería Agrícola de la Universidad de Concepción, campus Chillán.
El académico destacó que, en el marco de estos cambios, el ingeniero civil agrícola se ha posicionado entre los profesionales mejor remunerados de Chile, con un ingreso mensual promedio de $1.790.000 al cuarto año de titulado, lo que la ubica en el puesto número 14 de las carreras mejor pagadas de Chile, en base al ranking que elabora el portal Dondeestudiar.cl, desarrollado por Corfo.
Un sondeo realizado por la carrera entre 121 exalumnos reveló, además, que, al sexto año de titulado, el profesional percibe una remuneración promedio superior a los $2,2 millones.
“Esta carrera tiene la particularidad que es única en el país, no se dicta en ninguna otra universidad. Es relativamente nueva, se comenzó a dictar a principios del siglo 20 en Estados Unidos, y luego los profesionales del Plan Chillán y de Agronomía trajeron la idea en los años sesenta, hasta que se creó la carrera en 1988, como una forma de dar respuesta a la necesidad de modernización tecnológica en el sector, abordando la mecanización y el riego, hasta llegar al presente, en áreas como la gestión del agua, la agricultura de precisión, las energías limpias, la valoración de subproductos, la automatización y el uso de tecnologías de información para una agricultura inteligente”, explicó.
Amplio campo laboral
El Dr. Souto destacó, además, la alta empleabilidad de la carrera, pues al primer año tras la titulación el 90% tiene un trabajo, mientras que el 40% comenzaron antes de titularse.
Según el docente, el campo laboral de los ingenieros civiles agrícolas es cada vez más amplio, y reconoció que “a pesar de que Ñuble es una región de gran desarrollo agrícola, la cantidad de egresados que están trabajando en la región es baja en comparación con otras regiones, producto del desarrollo que ha tenido la agricultura en otras zonas, que es mucho más grande que acá”.
“Los egresados están migrando, en el último tiempo, a regiones donde la agricultura se está desarrollando en forma exponencial, por ejemplo, en La Araucanía tenemos bastantes profesionales, así como también están aumentando en Los Ríos y Los Lagos, que son regiones donde la agricultura se está expandiendo, principalmente en el área de recursos hídricos. Otros destinos destacados son la región de O´Higgins, donde hay gran desarrollo frutícola, y también la Metropolitana, en gestión de recursos hídricos”, complementó.
El mismo sondeo confirmó que una gran mayoría (82%) de los titulados se desempeña en áreas vinculadas a los recursos hídricos, lo que según el Dr. Souto no debiera sorprender, dado el prestigio que tiene la Facultad de Ingeniería Agrícola UdeC en esta área, y que es precisamente uno de los ejes de la formación académica y de la investigación que se desarrolla. Otras áreas importantes son la robótica, la teledetección, los emprendimientos de servicios, la energía y la agroindustria.
En el sector público, los egresados se pueden desempeñar en instituciones como la Dirección General de Aguas (DGA), la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH), la Comisión Nacional de Riego (CNR), el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y el Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap), entre otros.
En el mundo privado puede integrarse a empresas de diseño y construcción de obras hidráulicas y sistemas de riego, agrícolas, agroindustriales, forestales, mineras y de servicios, entre otras; así como también en organizaciones de usuarios de agua, como las juntas de vigilancia, las comunidades de agua y las asociaciones de canalistas.
Otra área que toma cada vez más fuerza es el de los emprendimientos de servicios, donde destacan las consultoras, pero también las empresas de base tecnológica, por ejemplo, Trion SpA, fundada por dos exalumnos de FIAUdeC para escalar comercialmente las invenciones que se están generando en el Laboratorio de Robótica de Campo, donde se trabaja en soluciones para el mundo agrícola y agroindustrial de la mano de la automatización y la inteligencia artificial.
Precisamente, la calidad del cuerpo docente, la investigación, la infraestructura y el equipamiento de sus laboratorios han sido clave en mantener vigente el prestigio de la carrera. “Al comenzar el segundo semestre recibimos la visita de nuestros alumnos de primer y segundo año, quienes no habían podido venir al campus debido a la pandemia, y todos, sin excepción, quedaron muy impresionados con el campus, las salas, las áreas verdes y los laboratorios”, recordó el profesor Souto.
Finalmente, el jefe de carrera subrayó las competencias que adquiere el ingeniero civil agrícola, y que lo convierten en un cotizado profesional. “Nuestros egresados están preparados para gestionar y optimizar el uso de recursos hídricos, lo que es fundamental para cualquier empresa; también para optimizar la adaptación al cambio climático de cultivos y frutales en torno a los recursos hídricos, que es muy pertinente dado el contexto que estamos viviendo; también pueden gestionar y optimizar procesos productivos en la agricultura, en la agroindustria y otros sectores, de igual forma, diseñar y construir soluciones tecnológicas para la agricultura y la agroindustria; e implementar y gestionar el uso eficiente de las energías renovables no convencionales”, enumeró.
Comentários